Los mitos griegos (publicada en 1955 y revisada por el autor en 1960) sistematizan el amplísimo material de
la mitología clásica de acuerdo con un método consistente «en reunir en una narración armoniosa todos los elementos
diseminados de cada mito, apoyados por variantes poco conocidas que pueden ayudar a determinar su significado, y en
responder a todas las preguntas que van surgiendo en términos antropológicos o históricos». Como señala Carlos García
Gual en el prólogo, «el texto de Robert Graves ha logrado congregar, de manera muy bien ordenada y completa, todas esas
narraciones, y volver a contarlas, punto por punto, secuencia tras secuencia, con un brillante estilo, manteniendo con
esa fresca narración algo de su frescor antiguo».