En los últimos años se han elevado las tasas inaceptablemente altas de sufrimiento, discapacidad y muerte prematura que experimentan las personas con depresión. Actualmente, existe más de una veintena de medicamentos antidepresivos disponibles en el mercado, los cuales son dirigidos al sistema neuronal, principalmente a la serotonina (5-HT) y la noradrenalina (NA). Estos medicamentos, no obstante, no funcionan en todos los pacientes, por ello, en el año 2006, un equipo de médicos —como el doctor Carlos Zarate, en Estados Unidos, el doctor Angelo De Gioannis, en Australia, o Diogo Lara, en Brasil— llevó a cabo una investigación para desarrollar el uso y los beneficios de la ketamina (CI-581) con el objetivo de tratar diversos trastornos mentales, como la depresión, con excelentes resultados. La ketamina fue sintetizada en 1962 por Calvin Stevens y es usada clínicamente en humanos desde 1964 por los doctores Guenter Corssen y Edward F. Domino. Esta sustancia, que por sus efectos alucinógenos es considerada como una droga disociativa, en la actualidad también es utilizada por la medicina por sus propiedades sedantes, analgésicas y anestésicas, debido a la acción que produce en personas con depresión mayor, así como en aquellos que padecen alcoholismo y otros trastornos. En este libro, se desarrolla todo lo que deberías saber sobre los orígenes de la ketamina, su funcionamiento, su seguridad como antidepresivo, así como los debates que se han ido generando por el uso de esta sustancia en los seres humanos.