Cuando se llega al diagnóstico de «trastorno del espectro autista», la familia y el entorno más directo del niño afectado no tardan en hacerse muchas preguntas: ¿se siente solo?, ¿por qué le cuesta tanto dormir?, ¿cómo percibe el mundo?, ¿cómo hay que afrontar los inevitables imprevistos que tanto le estresan?, ¿quiere a su familia, aunque no lo demuestre, como lo hacen los niños no autistas?
Este libro explica de una manera clara y sencilla los descubrimientos neurocientíficos recientes y, a diferencia de la bibliografía disponible, parte del marco de referencia de una persona autista —una de las autoras—, que nos cuenta en primera persona su experiencia para que los lectores puedan hacerse cargo de lo que supone ser una persona autista en un mundo de no autistas y sepan responder mejor a sus necesidades cotidianas.