«A veces algo inesperado rompe todos los planes de futuro, incluso los del presente. A mí me ha ocurrido. Me ha tocado reconfigurarme por completo. Para todo: trabajar, conducir, relacionarme con mi familia, seguir viendo a mis amigos, reubicarme en mi casa y, en genetal, en mi vida…
¿Qué hacer cuando el destino te golpea así? Yo solo tengo una receta. La mía propia. Y a mí me funciona porque quiero seguir bebiéndome la vida a tragos».