Akamatsu llega a un acuerdo con Seven, el enigmático joven con quien solía pelearse en el parque: ambos compartirán piso durante tres meses, mientras Seven ahorra dinero y se busca vivienda propia. Pero su convivencia atraviesa un momento difícil después de que el hermano de Akamatsu los interrumpiera a punto de darse un beso en casa de sus padres. Escena que tuvo lugar después de que Seven averiguase que Akamatsu es gay. Y después de que le agarrara el rabo en el baño. Total, que la cosa está un poco tensa. Pero no pasa nada, todo se soluciona hablando. O usando la lengua, en cualquier caso.