La receptividad es una de las características fundamentales que marca nuestra existencia como seres humanos: estamos permanentemente abiertos a todo aquello que recibimos de fuera, a los dones y los estímulos que nos llegan de otras personas y de nuestro entorno. Este hecho nos convierte en seres frágiles, vulnerables, pero también capaces de desarrollarnos si contamos con los recursos y el apoyo necesarios. Somos, pues, dependientes unos de otros, y de esta dependencia y receptividad connaturales que hay en todos nosotros emergen las condiciones de necesidad y de posibilidad para la vida ética, experiencia vital que hemos de desarrollar para alcanzar una vida buena. Xabier Etxeberria trata de elaborar en este libro una profunda reflexión en torno a la noción filosófica de receptividad y el papel que esta desempeña en nuestra existencia y nuestra forma de relacionarnos.