El juego es simple, la pelota va y los perros corren detrás de ella para traerla de vuelta lo más rápido posible. Todos los días lo mismo, en el mismo parque y a la misma hora, sin embargo, cada día es diferente pues lo inesperado, tarde o temprano, siempre acaba ocurriendo. Un divertido e ingenioso álbum ilustrado que hará reír a los más pequeños de la casa.