Si bien la mayor parte de los relatos se centran en las malas prácticas financieras de
determinados sectores, en Sombras. El desorden financiero en la era de la globalización,
Michael Ash y Francisco Louçã se disponen a demostrar que, lejos de ser su rama disidente,
las finanzas en la sombra que iniciaron la crisis están estrechamente entrelazadas con, y
resultan altamente lucrativas para, las finanzas de base bancaria.