"Una vez una mujer se acercó a mí y me dijo: 'Sr. Escher, estoy absolutamente loca por su obra. En su litografía Reptiles ha dado con una ilustración tan notable de la reencarnación...'. Respondí: 'Señora, si así lo ve usted, que así sea". Un comentario astuto del renombrado artista gráfico holandés Maurits Cornelis Escher (1898-1972), cuyos dibujos complejos y ambiguos se resisten a las interpretaciones apresuradas.
Mucho antes de las primeras imágenes en 3D generadas por ordenador, Escher ya era un maestro de la tercera dimensión. Su litografía Espejo mágico data del lejano 1946. Al usar tal título para este libro, el matemático Bruno Ernst remarca el hechizo que el trabajo de Escher provoca invariablemente en aquellos que lo contemplan. Ernst visitó a Escher todas las semanas durante un año, hablando con él sistemáticamente de toda su obra. Sus debates forjaron una amistad que le dio a Ernst acceso a la vida personal y al mundo conceptual de Escher. El propio Escher analizó meticulosamente la visión de Ernst de su obra y precisó algunos aspectos.
El trabajo de Escher se niega a ser encasillado. Los criterios científicos, psicológicos o estéticos por sí solos no pueden hacerle justicia. Las preguntas permanecen: ¿por qué creó las imágenes? ¿Cómo las construyó? ¿Qué estudios preliminares fueron necesarios antes de lograr la versión final? ¿Y cómo se relacionan sus diversas creaciones? Este libro, completado con datos biográficos, 250 ilustraciones y un completo desglose de cada problema matemático, ofrece respuestas a estos y muchos otros misterios persistentes, y es un texto auténtico y de primer orden.