En esta obra, la poeta se ha centrado en los conceptos de identidad y pérdida de la misma a través de la idea de que todas las personas son a la vez muchas y ninguna y de cómo, a veces, la única forma de encontrarse es ver el reflejo propio en la mirada ajena. «Persona» es «máscara» en griego y Personne puede leerse como un drama donde por fin vemos a una poeta separada de su yo para convertirse en ellos y ofrecer al lector, contra lo que es habitual en tantos libros, una colección de máscaras absolutamente nuevas para que podamos ver e intentar reconocernos, como pedía Machado (una de las citas que abre el libro) "a través del ojo del otro".