Tras superar no pocas dificultades, el matrimonio Calloway sigue unido. Russell continúa trabajando como editor, aunque en un puesto menos importante, y Corrine ha dejado su trabajo en la bolsa para dedicarse a sus dos hijos pequeños y a escribir un guion cinematográfico.
En el Upper East Side, Luke McGavock, un multimillonario gestor de inversiones, ha decidido tomarse un año sabático para poder dedicar más tiempo a su mujer y su hija adolescente. Sin embargo, una mañana de septiembre de 2001 el cielo de Nueva York se oscurece y en los días posteriores, gente que no estaba destinada a encontrarse termina trabajando mano a mano en las tareas de reconstrucción de la ciudad.
En La buena vida, Jay McInerney retoma a sus dos personajes más carismáticos y se emplea en lo que sabe hacer mejor: presentarnos la complejidad social y moral de la ciudad de Nueva York y a unos personajes en los que encontraremos ecos de nuestras propias vidas.
«Conmovedor, sabio y también sorprendente en su retrato de una pasión despertada por las casualidades. De todos los libros sobre el 11S es quizá el único que consiga permanecer.» Arena
«McInerney hace lo que debe hacer un buen novelista: tomar una idea abstracta e insuflarle vida.» Alain de Botton
«El tema del libro es el cataclismo del 11S y McInerney lo hace suyo con la autoridad y la convicción del auténtico maestro… McInerney se une aquí a un pequeño número de novelistas que nos hacen cambiar la manera en la que vemos la historia de los Estados Unidos.» Sunday Telegraph