Describe cada fase de la travesía individual e intelectual de Foucault, desde su inicial interés en los sueños hasta su preocupación final por la sexualidad y la naturaleza de la identidad personal.
Miller nos sitúa en los días culminantes del estructuralismo en París y en el caos de la rebelión de mayo de 1968; relata, entre otros, los debates de Foucault con Sartre y Derrida y sus encuentros con Chomsky y Habermas. Y, con revelaciones que han conmovido a los lectores de todo el mundo, propone el primer relato de las obsesiones de Foucault con la muerte, el suicidio, las drogas y el erotismo sadomasoquista, incluso ante la amenaza del Sida en los años ochenta.