«El 7 de abril de 1963 amaneció especialmente frío en Ávila, y una copiosa nevada cubrió de blanco
las montañas y caminos circundantes. Era Domingo de Ramos, pero ni el domingo ni los ramos impidieron que fueran asesinados dos frailes y un boticario». Así empieza esta trepidante novela, cuya peripecia ?entre policiaca y costumbrista? da pie al autor para dibujar un preciso mosaico social de la España de los años 60 del pasado siglo, con su lucha por la vida, corrupción, desigualdad y miseria, así como la inclemente (des)educación de los internados religiosos, en medio de castigos físicos y morales y casos de pederastia.