Un hombre anónimo, que lleva una vida insípida, carente de anhelos, proyectos, o afán por el dinero, se convierte en la pieza clave de un misterioso engranaje donde se mezclan mafiosos de poca monta, un informático sobrepasado por sus propias habilidades, y una disparatada sucesión de montajes y simulacros.
A pesar de su brevedad, Micronesia condensa de manera irónica y cargada de humor la soledad de un hombre cuya rutinaria existencia se ve de pronto arrastrada por la corriente del sinsentido absoluto.
Tenga cuidado, y no se deje seducir por las apariencias: el próximo Armando Bermúdez puede ser usted.