Unos restos inidentificables en la capilla de los Medici, en Florencia, abren la caja de Pandora de uno de uno de los misterios sin resolver del Renacimiento italiano. En la cripta de la capilla de los Medici en Florencia, la antropóloga forense, Edie Granger y su tío Carlin Mackenzie se encuentran examinando los restos momificados de la poderos familias. Los embalsamadores parecen haber hecho su trabajo muy bien en lo que se refiere a la apariencia externa de los cadáveres, pero debajo de la piel tirante los órganos han encogido hasta convertirse en miniaturas de lo que fueron en principio, lo que significa que será muy complicado conseguir recolectar una muestra de ADN que se pueda utilizar. Tanto Edie como Mackenzie tienen serias dudas de la verdadera identidad de al menos dos de los cadáveres de más de quinientos años que han analizado. Nadie puede explicar la presencia de un objeto extraño que se encuentra al lado de la columna vertebral de Cosimo de Medici. Para Carlin, este es el descubrimiento más fascinante y peligroso de su carrera. Para Edie, es el comienzo de una búsqueda obsesiva que amenazará su vida.