Con casi 3.500 km de longitud, el sendero de los Montes Apalaches es el camino pedestre más largo del mundo.
Discurre por el Este de Norteamérica a lo largo de catorce estados, desde Maine hasta Georgia, y atraviesa algunos de
los paisajes más indescriptiblemente bellos del continente. Sin apenas experiencia en senderismo, desafiando las
adversidades meteorológicas y geográficas, y menoscabando el peligro de una fauna hostil (desde el improbable oso
americano hasta el amenazado mejillón de agua dulce), el socarrón Bill Bryson decide emprender el camino acompañado
únicamente de su ácida capacidad descriptiva, una mochila cargada de cosas inútiles y su tosco amigo Katz, cuya forma
física es incluso más lamentable que la suya propia.