Tres días antes de su boda, Nouf Shrawi, hija de una de las familias más influyentes de Arabia Saudí,
desaparece. Diez días después, encuentran en el desierto el cadáver de la joven de apenas dieciséis años. La autopsia
revela que estaba embarazada de varias semanas y que la causa de la muerte fue la deshidratación. Nayir al-Sharqui,
guía del desierto que participó en la búsqueda de la muchacha, no parece muy convencido con la versión oficial de los
hechos, especialmente cuando todo apunta a que un miembro del poderoso linaje, muy interesado en cerrar el caso a toda
prisa, podría estar implicado en la desaparición y muerte de la joven.