Tarde o temprano los asuntos que no se han resuelto en el pasado vuelven a emerger inesperadamente. Hace
más de veinte años, el secuestro en Escocia de una millonaria y su hijo acabó de la peor manera posible: después de la
entrega del rescate, a la mujer se la encontró muerta y su hijo desapareció. Ahora, cuando ya casi nadie recuerda el
trágico suceso, un periodista reabre la investigación al descubrir una pista que lleva a la Toscana. A la inspectora
Karen Pirie le asignan este desagradable caso frío en un mal momento. Pirie está enfrascada en un feo asunto
relacionado con la desaparición de Mick Prentice, un trabajador que había decidido convertirse en esquirol en el apogeo
de la huelga de mineros que ha estado sacudiendo al país. Algo muy, muy turbio se esconde tras este caso, que en un
principio parecía rutinario.