Shutter Island está cerca de Boston. Es una pequeña isla en la que tan solo destaca el Hospital Ashecliffe,
un centro penitenciario para enfermos mentales. El agente federal Teddy Daniels y su compañero, Chuck Aule, acaban de
desembarcar. Un peligroso asesino se ha escapado pese a las férreas medidas de seguridad. No podrá salir de la diminuta
isla, así que Daniels tan solo mira el reloj. Una rutina más. Lehane nos condena a correr y no mirar atrás, como hace
Teddy Daniels, una vez deduce que la única y simple razón de que haya sido destinado a Shutter Island es: que no vuelva
a salir. Pero ¿por qué a él?