"Qué despacio pasa el tiempo cuando aguardas al hombre al que vas a matar".
Semana Santa de 1928, Madrid es una ciudad convulsa donde se mezcla lo nuevo y lo viejo. Mientras la dictadura del general Primo de Rivera da sus últimos estertores, Tomás Halcón, antiguo policía y legionario de la guerra de África, recibe la visita de Marcial, amigo y excompañero del ejército, para que colabore en la resolución de un asesinato. La violencia con la que se ha perpetrado el homicidio pone en alerta a los altos cargos del Gobierno, pues temen que el asesino pueda ser un militar. Su nerviosismo aumenta con cada víctima; saben que solo Halcón puede resolver el caso.
Entre el desasosiego producido por los recuerdos de la guerra, los crímenes y la barbarie aparece Ana, una mujer que hará que Tomás recupere la cordura entre tanto desconcierto.
Haciendo gala de un estilo muy visual, casi cinematográfico, Vicente Martín Terán construye un thriller trepidante en el que cazador y presa quedarán atados para siempre. Mezclando crónica histórica y novela negra, realiza una indagación psicológica sobre el origen del mal, la venganza y la culpa y el amor como única vía de redención posible.