Joost y el príncipe I-an se ven apresados bajo tierra y condenados a permanecer allí como esclavos, salvo que superen tres pruebas.
Durante el recreo, y mientras se juega a preguntas y respuestas, ha aparecido en el patio del colegio el Rey de los Infiernos, que promete al joven Joost una piedra de luna si es capaz de seguir su rastro. Joost deberá seguir sus misteriosas huellas y descender hasta los mismísimos infiernos. Por suerte, su amigo Jan le acompañará un tramo. Pero hay alguien más que baja a los infiernos para cumplir una promesa: el príncipe I-an. Joost y el príncipe se ven apresados bajo tierra y condenados a permanecer allí como esclavos, salvo que superen tres pruebas: construir un palacete de oro en un solo día, identificar a la más pequeña de las treinta hijas idénticas del rey y entregar a Magoguele una estrella de verdad.
¿Serán capaces de llevar a cabo la misión que el pérfido rey les ha encomendado...?