La vida de Renata, la protagonista de Naturaleza infiel, podría entenderse como la historia de una deriva o
de una huida hacia delante, pero nunca como la historia Y mientras la madre intenta fundar un nuevo hogar, Renata y su
hermana María se precipitan. Por momentos, el sexo y las drogas tensan la narración, la despojan de adornos
innecesarios, de excusas. Nos sacuden como pocas veces en la literatura moderna. El destino que nunca llega, los
amantes que se suceden, la oscuridad que a veces resulta angustiosa hacen de Naturaleza infiel un texto inquietante y,
sin embargo, plagado de luz, lirismo, humor y ternura, con un estilo y un talento fuera de lo común. Cristina Grande
era hasta hace poco una autora de culto entre selectas minorías. Ahora, con esta novela, demuestra que todos podemos
confiar en su voz, que está llamada a ser una de las voces de referencia de su generación.