Un joven periodista que investiga el misterio relacionado con un cuadro antiguo desaparece sin dejar rastro; un peregrino, malherido y ensangrentado, es encontrado deambulando, en plena noche, por una carretera de Tafira, en la isla de Gran Canaria. A partir de estos dos acontecimientos, en principio inconexos entre sí, da comienzo el quinto caso del detective canario Ricardo Blanco.Curas que esconden la verdad, monjas que no son lo que parecen, extorsionadores desalmados y una pintura de arte sacro de gran valor que aparentemente nunca ha existido forman parte de una trama de corrupción en la que Blanco deberá emplearse a fondo para desenmascarar la verdad. El lector intuitivo y sagaz, acostumbrado a las novelas de José Luis Correahallará en Nuestra Señora de la Luna, una versión más humana e íntima del detective Blanco. El lenguaje ágil, directo, irónico, lleno de sutilezas y sentido del humor, atrapará al lector desde las primeras páginas. José Luis Correa ha logrado crear una pintura colorista del ambiente isleño con unos personajes entrañables.