?Problemas con mis padres que hay que cambiar?, esta es la frase que más se repite en las conversaciones entre las cuatro chicas protagonistas de este libro, víctimas de unos padres que las sorprenden en situaciones embarazosas. Y de verdad, resulta insoportable que te llamen ?tesorito? en público, tener que sonreir al novio de mamá, obedecer a un padre aficionado a las saludables tradiciones pasadas y tener que aceptar a una madre en minifalda que está convencida de ser todavía una adolescente.