Esta es la historia de una modesta princesa alemana que a los 14 años de edad fue enviada a Rusia con el único fin de que se casase y diese un heredero al imperio, y que acabó reinando durante 34 años. De ella se nos han conservado tres versiones distintas: la de una ilustrada que mantenía correspondencia con Diderot y con Voltaire; la de una mujer corrompida que cambiaba constantemente de amantes (la “Mesalina del norte”), y la de una gobernante despótica, decidida a modernizar Rusia, que mereció por ello que se la recordase como “la Grande”. Robert K. Massie se ha enfrentado a este laberinto de imágenes contradictorias para buscar la verdad humana del personaje y ofrecernos, en contrapartida, el ”retrato de una mujer”. Autor de obras de tanto éxito como Nicolás y Alejandra y Pedro el Grande, por las que obtuvo el Premio Pulitzer, Massie, que es uno de los maestros de la biografía literaria, ha conseguido de nuevo un libro memorable, del que los críticos han dicho que nos ofrece “una gran historia contada por un maestro de la narración”.